Následující text není historickou studií. Jedná se o převyprávění pamětníkových životních osudů na základě jeho vzpomínek zaznamenaných v rozhovoru. Vyprávění zpracovali externí spolupracovníci Paměti národa. V některých případech jsou při zpracování medailonu využity materiály zpřístupněné Archivem bezpečnostních složek (ABS), Státními okresními archivy (SOA), Národním archivem (NA), či jinými institucemi. Užíváme je pouze jako doplněk pamětníkova svědectví. Citované strany svazků jsou uloženy v sekci Dodatečné materiály.

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Georbanelis Betancourt ()

• nació el 27 de septiembre 1988 en Guantánamo, República de Cuba

• creció con su abuelo, ya que su madre era alcohólica crónica y varias veces fue encarcelada

• en el año 2010 lo detuvieron al ser cómplice de matar a una res y fue sancionado y recluido a laboral en casa al ser dado de baja de la “Casa del Trabajo”

• desde 2010 hasta 2014 trabajó como fumigador de pesticidas en los campos

• en 2012 participó en una campaña de la “Brigada de Respuesta Rápida” con el objetivo de prever epidemias, específicamente erradicar y combatir la epidemia de cólera del 2012 en Cuba

• se dedica a la música, su legítima aspiración es convertirse en un músico profesional

• en 2019, con el fin de mejorar sus condiciones de vivienda y economía se cohesionó a la corriente de periodistas independientes cubanos

• vive en Guantánamo con su esposa y dos hijos en una nave de abono

“La realidad en Cuba se mantiene oculta, la gente no quiere ver que lo que viven hoy, es la realidad”, explica Georbanelis Betancourt Lopéz, un joven periodista independiente, éste es el motor de su decisión, al publicar abiertamente los testimonios sobre las condiciones de vida de los cubanos.

Asistencia social

Georbanelis Betancourt Lopéz nació el 27 de septiembre 1988 en Guantánamo, en la República de Cuba. Viene de una familia disfuncional, ya que su madre era alcohólica crónica y su padre vivía separado de ellos. A Georbanelis lo crió su abuelo, gracias al cual siempre iba a la escuela con ropa limpia y zapatos, objetos de los cuales no todos los niños de su edad disponían. De su infancia en Guantánamo rememora la visita de la asistencia social: “Una vez vinieron a la casa, porque mi madre era alcohólica y yo su único hijo, tomaron fotos, revisaron la casa, prometieron que se iban a dedicar al caso, pero no hicieron nada”, así menciona dolido la indiferencia del sistema a las realidades del pueblo cubano. Debido al alcoholismo de su madre no fue aceptado en el servicio militar obligatorio, pero fue justo durante su adolescencia, cuando su progenitora carió de capacidades para cuidarse a sí misma. Como resultado de esto, obviamente, Georbanelis no recuerda su juventud con emoción: “Me traumé mucho, me perjudicó psíquica- y mentalmente”.

Sanción por haber matado una res

Su madre muy frecuentemente estuvo presa y en su casa la visitaban, según Georbanelis, seres un poco extraños en aquella época: “A nuestra casa venían varios criminales, lesbianas, gente distinta a lo común. Yo no quise seguir este camino, por este motivo siempre he sido una persona no problemática, no tenía problemas en la escuela ni con la policía”, explica Georbanelis su postura hacia el sistema cubano en el transcurso de su adolescencia, por lo cual fue muy sorprendente, cuando en el año 2010 se presentó la policía en su casa para llevarlo a las interrogaciones. “Un hombre me hizo trampa, fuimos a cortar leña juntos, pero este hombre amarró un animal de otro señor para obtener la carne de res. Posteriormente me dio dinero por ayudarle, yo no quise aceptar, pero al final acepté y eso era el problema, ya estuve involucrado en un crimen”, describe la causa de su encerramiento durante un mes en la Oficina de Operaciones de La Seguridad del Estado. Según Georbanelis, las condiciones dentro de la Seguridad del Estado eran horrorosas: pésima alimentación, torturas psicológicas y físicas. Georbanelis logró liberar el encarcelamiento y salir gracias al apoyo de su familia con el pago de la fianza. Al final, su sanción ameritó un expediente en la “Casa del Trabajo”, la institución más importante para repartir los trabajos en Cuba, y una multa cuyo monto fue de 1,940 pesos cubanos por daños causados - dinero imposible de pagar para un cubano con ingreso promedio, el cual en 2010 era 450 pesos cubanos al mes.

La epidemia de cólera

Como resultado de su baja laboral en la “Casa del Trabajo” durante de tres años, fue obligado a buscar faenas no deseadas por nadie y por cuenta propia. Finalmente encontró ocupación como fumigador en los campos, lo cual recuerda con aversión: “No había protección como traje o guantes, aunque era veneno. No nos daban nada. Tragué mucho humo venenoso, por eso hoy día enfrento problemas respiratorios”, narra Georbanelis. Además de nula protección contra los pesticidas, tuvo que afrontar la precariedad de la alimentación proporcionada y a las insoportables condiciones bajo el sol desde la madrugada. Asimismo, como parte de su sanción se tuvo que convertir en miembro de la “Brigada de Respuesta Rápida”[1] justo en 2012, durante la epidemia de cólera en Cuba[2] y participó en la “Campaña de Ayuda Rápida”, con el fin de prever y erradicar las enfermedades epidémicas. “Había bastantes casos críticos, llevaba cloro a la gente para que se lavaran las manos, para evitar las enfermedades”, se acuerda Georbanelis de sus tareas. Según él, las epidemias y endemias en Cuba se repiten debido a la pésima política gubernamental, ya que sus acciones son inefectivas, existen fumigaciones de las casas, no obstante: “Las ratas regresan, la gente tiene pisos de tierra, no se lavan las manos porque no hay agua, no se ponen ropa limpia, hay escasez de jabón, en general son las condiciones de la vida de los seres humanos”, comenta tristemente. Según Georbanelis, las autoridades asisten a las viviendas, revisan la situación y elaboran un reporte con promesa de mejorar las condiciones higiénicas, sin embargo, nunca ocurre nada.

Si no tienes dinero, no avanzas

Después de cuatro años de haberse dedicado a las fumigaciones y a liquidar la multa impuesta por robar aquella res, abandonó esta actividad, y al mismo tiempo se salió de la “Brigada de Respuesta Rápida” y sus campañas: “Aunque ya acabó mi sanción, me sentí preso”, así describe con disgusto la vigilancia policial y la obligación de acudir semanalmente a la oficina de la Seguridad del Estado con el fin de firmar presencialmente un control. Lo observaban para identificar a las personas con las cuáles se veía y qué actividades realizaba. Uno de sus frecuentes intereses es música: “Me gusta escuchar y escribir música, pero me limitan, me ponen obstáculos en mi camino, sin embargo, la música es mi meta de la vida, es mi futuro”, añade con determinación. Georbanelis declara que si no tienes dinero, es muy difícil avanzar - es necesario tener apoyo de alguien económicamente fuerte, o de un promotor cultural, o tener mucha influencia en la gente, o tener dinero: “Vale más tu dinero, que tu talento. Hay mucha persona gusana en el mundo de la música”, pero no se rinde y añade: “cuento conmigo mismo, voy a alcanzar mi meta de hacer música profesional”.

Los hogares cubanos

Después de la sanción se dedicó a la albañilería: “El salario no alcanza para nada, gano 450 pesos cubanos al mes, la carne para los fines de semana cuesta 100 pesos”, comenta la presión económica de su familia. Georbanelis tiene dos hijos, para los cuales logró comprar una vivienda por 4,000 pesos cubanos en la comunidad de la Habilla: “Vivimos en una nave de abono, con techo alto por donde entran varios animales, como alacranes, pájaros, arañas o los insectos, no es un lugar seguro para los niños”, refleja con angustia. También menciona, que las condiciones de vivienda de mucha gente son aún peores: “En la casa de mis suegros viven nueve personas, durmiendo en un cartón en el piso de tierra”. Los hijos han sufrido varias veces enfermedades graves e infecciones: “Ingresaron a hospital por escabiosis, también por rotavirus, el ambiente no es nada saludable, el aire prácticamente es mierda de animales o estiércol de los caballos”. En su angustia se acercó al delegado de la zona y a los trabajadores sociales, también pidió un préstamo para ir reparando poco a poco su casa, pero sin éxito alguno: “Todos conocen mi caso, no actúan nada. Dijeron que hay casos más críticos, que todo es un proceso”.

Quiero que se vea la realidad

Desde hace un año, en 2019, se fusionó al periodismo independiente en Cuba. Como comenta él mismo, esto debido a la imperiosa necesidad económica y urgencia de mejorar las condiciones de vida de sus dos hijos. Sus acciones como periodista apoyan a la gente en la delicada tarea, de ver un mejor futuro en sus vidas, sin dejarse sumergir ni empantanarse en los problemas que a diario confrontan. En la actualidad se encuentra bajo la investigación por la Seguridad del Estado debido a la publicación de un video, donde muestra las condiciones de vida de su familia, y así comenta: “Necesito que se dé una solución al problema de mi familia, y de todos otros, quiero por fin resolver la situación no favorable”. El profundo sondeo del que ha sido objeto por la policía estatal, con la finalidad de encontrar pruebas que lo vinculen a los contrarrevolucionarios u opositores del Gobierno, no ha detenido en ningún momento a Georbanelis en sus actividades: “La vida ha sido dura y sigue siendo dura. Quiero lo mejor para mis hijos, trabajar dónde sea, buscar por donde sea, para que ellos puedan comer” y cierra su testimonio enfatizando la importancia de poder publicar abiertamente “hay muchas personas que no conocen las situaciones, las condiciones de vida, o no los quieren ver. Quiero que se vea la realidad que hay gente que realmente sufre. Darse cuenta de que lo que viven, es la realidad”.

 

[1] “Brigada de Respuesta Rápida“ es un remedio de insultar o atacar a los oponentes del régimen comunista u otros grupos de la sociedad. Las Brigadas están formadas por los cubanos comunes, incluso por los mismos vecinos o compañeros. Más información aquí: https://adncuba.com/actualidad/revolucion-gritos-y-golpes-reactivan-en-cuba-las-brigadas-de-respuesta-rapida

[2] Más información sobre las epidemias en Cuba aquí: https://www.cibercuba.com/noticias/2020-03-14-u199370-e199370-s27061-epidemias-cuba-ha-superado-1959-actualidad